Capítulo 6

Ishido se ha llevado a Saúl a su apartamento de soltero. A Saúl no le hace nada de gracia pero Ishido se aprovecha del agradecimiento que Saúl tiene hacía él. Ishido le devora con los ojos ese culito que tanto le gusta.

--¡¡que a gusto voy a coger en este culito tan tiernecito¡¡ --dice Ishido para sí.

A Saúl no le gusta nada la manera en la que Ishido lo mira pero le dolería demasiado pensar que es cierto lo que él está sintiendo y que lo único que Ishido quiere es llevarlo a la cama. Saúl lo ve demasiado varonil como para atreverse a durar de su "hombría." Ishido está a cien. Estaba seguro que después de los tragos que se han tomado el guapo hombre ya estaría borracho y bajo su dominio pero Saúl tiene más aguante del que Ishido creía. Ishido le pone un trago más.

--estás muy nervioso... así estarás en ambiente...

Saúl no quiere tomar más porque tiene miedo, aunque no le ha sacado el ojo de encima, que Ishido le haya metido algo rato en la bebida para aprovecharse aún más de la situación.

--toma... no seas mal agradecido... ¿somos amigos no?

--si, gracias...

Saúl toma el trago que toma con desconfianza. Está de pie. Ishido se sienta en el sofá. 

--ven... sientate a mi lado...

Saúl se siente muy nervioso y lo más separado que puede pero Ishido se pega a él para nervios de Saúl que desea huir de ese apartamento y no mirar a la cara a Ishido pero tiene miedo a estar equivocado y quedar mal con ese hombre que lo ha ayudado. Ishido le pone la mano en el muslo y lo mira muy sensual. Saúl tose.

--¡¡no puedo estar equivocado¡¡ --dice para sí ya que el deseo de Ishido es evidente..

No se atreve a moverse por miedo a que Ishido se lo tome a mal. Y Ishido se aprovecha y frota con gusto el fuerte muslo de ese chico que tanto le gusta.

--me han dicho que no sabes besar... yo te puedo ayudar...--Ishido.

Ishido habla mientras va acercando su mano a los genitales de Saúl que no puede más y se levanta. Ishido se muere de la rabia. Está a 1000. Ese chico le gusta y mucho. Le gustaría lanzarse en ese mismo instante. Él mismo se infunde auto-control:

--No Ishido, Saúl no es del gremio... No le gusta esta marcha porque no la conoce... no puedes ir muy rápido porque lo vas a asustar y vas a perder la oportunidad de disfrutar un buen trozo de carne fresca de lo mejor --se dice para sí.

Pero Ishido sabe que le va a costar mucho controlarse pero está como loco por hacerle el amor a ese hombre que se le resiste. Saúl se siente en una silla frente a Ishido. Mientras estaba de espalda a él, Ishido le miraba el culito con deseo y tiene una mirada rabiosa por que él lo ha rechazado. Ahora los dos fuerzan una sonrisa.

--si gracias... Venga con la técnica... --dice que espera una charla y así sacárselo de encima.

Y Ishido no se controla y se lanza de rodillas hacia a él... lo quiere besar pero Saúl estaba atento a todos sus movimientos y se ha levantado justo a tiempo:

--¿¿¡que haces...??¡¡

Saúl mira a Ishido con mucha rabia, con decepción. Aunque por dentro está ardiendo de rabia y de frustración porqué el chico le huye, Ishido disimula, hace como si no entendiera qué le pasa al chico.

--¿porqué te pones asi? estamos entre machos... No sé de qué te sorprendes...

Saúl se lleva las manos a la cabeza. Está sofocado.

--¡¡me ibas a besar...¡¡

Ishido se le ríe:

--¿y por eso tanto escándalo? no creas que lo hago por gusto... Es la mejor manera de demostrar cómo se besa... te juro que después de mis lecciones ninguna mujer se te va a resistir...

Saúl ya no tiene dudas de lo que quiere Ishido pero aún así no se va porque no quiere parecer grosero. Desea que Ishido entienda por las buenas que de él no podrá obtener lo que busca. Además aún sigue sin poder creer que Ishido, de aspecto varonil, casado y deseado por todas las mujeres desee llevárselo a la cama. Aunque está muy alterado, Saúl procura hablar tranquilo:

--no... mira a mi ninguna mujer se me ha quejado en la vida real y eso es lo que importa... Sé besar muy bien...

--pero esto es ficción, por eso no te tiene que parecer raro que ensayes conmigo... Es como si yo fuera un maniquí... no te pierdas la oportunidad de ser el mejor, con mis consejos triunfarás.

--No... a mí nadie me dijo que a mi compañera le tenía que gustar mis besos... se supone que todo es ficción...

Ishido le pone las manos en los hombros:

--tú lo has dicho se supone. Si no sabes besar las chicas entre sí lo comentan... ya todos en el foro lo sepan y eso llegan a las fans y ninguna va a querer contigo...

Saúl se aparta de Ishido:

--ni modo... asumiré ese riesgo.

Saúl se a iba a ir porqué se da cuenta que Ishido no atiende a razones pero Ishido se le pone delante y le agarra del brazo. A Ishido le excita mucho tocarlo, a Saúl le pone nervioso.

--¿no quieres conquistar a Mia ?

--tanto se me nota...?

--yo te puedo ayudar pero tienes que hacer todo lo que yo te diga...

Y Ishido sonríe pensando en cuan lejos le dejará llegar Saúl con ese truco pero aunque no lo quiere creer Saúl se da perfecta cuenta de las intenciones de Ishido y así que acaba con esa historia ahí mismo con un rotundo:

--lo siento... a mi no me gustan los hombres...

Ishido se hace el ofendido:

--¡¡no me insultes... a mí tampoco¡

--pues no parece --le reprocha Saúl.

Y aunque le asusta que Ishido tome represalias contra él le dice:

--yo creo que tú me quieres llevar a la cama...

Ishido está furioso porque ve que no va a lograr lo que quiere con Saúl. Se hace de nuevo el ofendido:

--¡¡no seas malagradecido... Yo soy bien macho... no sé que basura tengas en la cabeza pero a mí me da asco los chicos que le gustan los chicos... todo esto lo hago por ti...¡

Saúl ya no lo puede creer:

--lo siento no puedo...

Saúl se va, Ishido se muere de rabia.

--tiene que ser mío ¡¡no es posible que este también se me escape vivo¡¡

Y su primer impulso es llamar a su amigo el productor para que despida a Saúl de inmediato pero después piensa en el cuerpo casi desnudo de Saúl. Ese culito que tanto le gusta.

--No... si hago esto podría hablar y me iría mal... a parte que me odiaría para siempre y entonces sí que ese culito nunca sería para mí ¡¡¡tengo que hacer lo que sea para que sea él quien desea acostarse conmigo¡¡ ¡¡pero qué?¡

Ishido está frustrado y da un golpe a la mesa:

--¡¡maldita sea¡

Y de nuevo suena su celular. Es su esposa.

--¡¡que flojera¡¡ 

En el antro en el que han ido no le molestaba porque no lo oia pero ahora así. Lo desconecta. Desde el fijo que tiene en el apartamento llama a Valentín .

--sí.

La voz de Valentín  suena jadeante.

--soy yo... te quiero ver...

e Valentín  está fornicando en ese momento con Miguel.

--¿puedo ir a tu casa?